martes, 31 de enero de 2017

LA PAZ... vista desde los ojos de una chica del s.XXI


Siempre hablamos de la paz con bastante tranquilidad, ya que pensamos que es algo que nos toca de lejos. En todo el mundo se realizan actos, se pide paz, se reza por la paz.... pero, ¿y tu paz?¿alguna vez te has preguntado por tu paz?

Si una cosa tenemos clara cuando celebramos este día, es que queremos la paz en el mundo, pero será imposible ponerla en funcionamiento si primero no reina la paz en nuestra vida, no se puede desear la paz en la familia si nosotros no disfrutamos la paz interior, y haciendo esta pequeña reflexión y desde mi punto de vista, el de una chica de 15 años me pregunto ¿y qué es trabajar por la paz? ¿como puedo hacerlo?

Creo que trabajar por la paz es establecer aquellas condiciones de vida que hagan a cada hombre feliz, seguro de sí mismo y de su futuro (y mira que he tenido que dedicarle un buen rato a sacar esta conclusión, pero después de tantos años celebrando este día creo que he aprendido que la paz no va más allá de nuestras fronteras si no más acá de nosotros mismos, de nuestro interior).

Trabajar por la paz es igualar las relaciones humanas, y no hablo de igualarlas a nivel internacional, hablo de igualarlas con mis padres, con mi hermano, con mis amigos, con mis compañeros del cole, con mis abuelos, con mis profesores... se trata de querer solucionar problemas, hacerse entender por todos, crear a nuestro alrededor un clima de comprensión, dar a cada uno lo suyo, respetando el derecho de todos. Y es que al fin y al cabo se trata de "querer", y como bien me dice siempre mi madre "querer es poder" y ¡qué razón tiene!. Cuando te propones algo y lo quieres, es fácil que salga bien si luchas por ello. 

Creo que somos nosotros, los niños y los adolescentes los que tenemos en nuestras manos la posibilidad de ofrecer la esperanza de un futuro mejor, pero para ello debemos ser conscientes que la violencia no es un recurso a utilizar, y que debemos rechazarla en todo momento y ante cualquier situación, como dijo Gandhi: "No hay camino para la paz, la paz es el camino". 
Debemos ir en busca de la paz escolar, de la paz familiar, de nuestra paz interior, de la paz social... y eso sólo podemos aprenderlo a través de nuestra propia vivencia, de una fe llena de generosidad, de empatia, de tolerancia, de amor... en pocas palabras: ser para los demás, para "ser" en paz.

En definitiva, buscar un camino de vida, donde dar felicidad a los demás sea el encuentro de nuestra propia paz, porque debe ser precioso llegar al final de nuestra vida teniendo en cuenta que hemos hecho el bien por los demás. Dios nos da todo, nos llena las manos y el corazón para que construyamos un mundo mejor, así que...¿por qué no? ¡ATRÉVETE A USAR ESE CORAZÓN Y ESAS MANOS LLENAS DEL AMOR DE DIOS, SOÑEMOS CON UN MUNDO DE PAZ!



Todo el cole nos comprometimos por la paz y firmamos este gran mapa.


Soñamos con un mundo de paz gracias a estas nubes.